El desafío de retomar el festejo popular en la calle, fue la consigna que convocó el viernes 17 de febrero, en la Plaza Unidad Latinoamericana, a unirse a la celebración de las murgas de Palermo.
En un día que auguraba mal tiempo, los vientos soplaron a favor y la Plaza, ubicada en Medrano y El Salvador, se colmó de alegría murguera, música, vecinos y compañeros, que se sumaron al festejo popular que se realiza dentro del Plan de Participación Comunitaria en Seguridad.
Alrededor de las 18,30 horas, se inició un taller de disfraces para chicos, donde los más pequeños se animaron a crear sus propias mascaras de carnaval, actividad que los acercó al sentimiento festivo y de grupo que tiene esta celebración.
Luego, mediante la proyección del video sobre “Nariz”, referente de la tradición murguera, y un cálido homenaje a los murgueros del barrio, llegó el momento de los grandes, de aquellos que vivieron en y por la murga, que la llevaron como estandarte en su vida y que son figuras entrañables del barrio.
Así los presentes conocieron a “Muralla” y a “Teté”, antiguas glorias murgueras de Palermo, quienes brindaron una actuación única y memorable.
Mas tarde, se presentó la banda “Los Inconscientes” y generó el envión para que, en el cierre, más de 300 personas cantaran y bailaran al son de la murga “Los Elegantes de Palermo”, que con sus trajes y espíritu de fiesta le pusieron el broche de color y alegría a este encuentro en el cual la cooperación de todos constituyó un eje fundamental, no solo por sumarse a este festejo de la cultura, por acercase al barrio, recuperar el espacio público, sino porque “la participación comunitaria es el camino a la seguridad”.
Las levitas brillaron con mil lentejuelas, las zapatillas de lona patearon el suelo, los cuerpos se elevaron saltando al cielo para caer al piso de nuevo, sabiendo que esta vez las baldosas volvían a ser de Palermo.
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